Se acercan las navidades, y con ello, uno de los momentos más tiernos para compartir con tu pareja. Por ello, os recordamos varios motivos por los que entrenar junto a tus seres más queridos tiene grandes beneficios.
El triatlón compartido es bueno para la pareja. De hecho, cada triatleta/corredor/ciclista/nadador debería añadir en los votos matrimoniales: “Prometo quererte, en buenos y malos entrenamientos, tanto cuando pedaleamos con el viento a favor, como cuando estamos subiendo a una colina luchando contra el viento en contra” entre una lista mucho más larga.
Os parecerá cursi. Sí, lo es. Pero se puede aprender mucho sobre la vida en una jornada de entrenamiento para un triatlón (o cualquier evento exigente). El entrenamiento te enseñará a afrontar altibajos, a seguir la corriente y adaptarte a ella y te ayudará a hacer pequeños ajustes cuando las cosas no salen como las habías planeado.
Entrenar para un triatlón tiene muchos beneficios, aunque ocupan mucho tiempo, y a veces tus seres queridos se pueden sentir solos o que te olvidas de ellos. Para evitar que eso ocurra, ¿por qué no hacer que se involucren en el entrenamiento? ¿No decís siempre que trabajando juntos, todo se puede conseguir? Pues adelante, hacedlo. Aún y estar en diferentes niveles de condición física y no hacer ejercicios juntos todo el tiempo, todavía hay muchísimos beneficios!
No tienes pareja? ¡Tranquilo, también sirve para amigos!
- Interés común: compartir un interés común refuerza la relación. Además, no es solo divertido. También os ayudará a que podáis extraer ideas el uno del otro y descubrir la que mejor se te adapta. Las revistas y noticias deportivas son las que rondaran en casa, y es aún mejor probar planes de entrenamiento distintos, otras barritas energéticas, material nuevo o recetas. Además, se te abre un abanico enorme de regalos de cumpleaños. ¡Se acabaron los dolores de cabeza por no saber que regalar!
- Guardaespaldas: seguro que te sientes más seguro nadando, encima de la bicicleta o corriendo con tu pareja al lado. Te sientes seguro, protegido y puedes centrarte en el entrenamiento o competición. Tienes un aliado, que por ejemplo cuando estás compitiendo en aguas abiertas, va genial.
- Más tiempo de calidad juntos: dado que ambos tenéis que sumar kilómetros, ya no os sentiréis
culpable si los entrenamientos son una prioridad ya que iréis juntos. Incluso si hay días en que la organización no permite ir juntos, trabajar en solitario también ayudará a aumentar la confianza y a valorar más el tiempo de entrenamiento acompañado. Además, si entrenáis en pareja os mantendréis ambos a ralla, para seguir el planning y también os motivaréis el uno al otro. - Estáis juntos en esto: el apoyo es fundamental. Entrenando juntos se comprenden los males del otro y los solucionáis juntamente. No se trata como en muchos casos de dar una palmadita en la espalda, hay que estar ahí, escuchar y apoyar al 100%. Hay un objetivo común y hay que llegar a él. La complicidad llega a límites insospechados!
- Juntos, todos conseguimos más: la palabra EQUIPO realmente funciona. Si en alcanzar un reto personal te invade una sensación de felicidad máxima, imagínate lo increíble que puede llegar a ser llegar a meta juntos. Solo con quien has entrenado sabe lo que has sufrido, tus altibajos y preocupaciones, si cruzas la llegada con esa persona nadie te entenderá mejor que esa misma.
Hacer triatlón juntos, va más allá de entrenar en pareja. Significa motivar, estimular, animar y apoyar a lo largo del camino para llegar juntos al clímax en la línea de meta!
