Segunda entrega del serial y esta vez de la mano de la triatleta INVERSE Dolça Ollé, que nos cuenta sus secretos para progresar con la bicicleta.

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La mayoría de triatletas populares solemos caer en el error de acumular y acumular quilómetros sin más encima de la bicicleta, con rutas cada vez más exigentes pero sin planificación alguna. El control de la cadencia, las pulsaciones o la potencia deberían de ir ligados ineludiblemente a cualquier entrenamiento en bicicleta que hagamos. Nadie mejor que la triatleta profesional INVERSE Dolça Olle, para que nos aconseje y cuente sus secretos en el mundo de las dos ruedas.

Aunque cada vez está más extendido el uso del potenciómetro la realidad es que todavía hay un porcentaje alto de triatletas que no lo utilizan. El precio de los medidores suele ser el principal escollo (o excusa) para no utilizarlo. No obstante, actualmente en el mercado hay medidores asequibles y fiables, por lo que si queremos dar un toque de calidad a nuestros entrenamientos en bici, no sería mala idea ir pensando en añadirlo a nuestra particular lista de la compra. Dolça Ollé afirma que, “hoy en día encontramos muchas marcas, variedad y rango de precios. Es muy importante realizar el test de los 20 minutos porque así podremos saber de manera aproximada la potencia crítica de cada persona y nos permitirá trabajar de manera individualizada según los vatios que nos corresponden”.

Por otro lado, normalmente tenemos la opción de entrenar en grupo o en solitario y habitualmente preferimos la segunda opción, ya sea porque es más cómodo ir a rueda o por el placer de la compañía, pero si estás entrenando para competir en pruebas sin drafting salir solo ha de pasar a ser en muchos casos tu primera opción. Ella nos comenta al respecto, “realmente entrenar con la bicicleta en grupo es muchísimo más divertido. El tiempo pasa muy rápido, pero también hay que combinar con entrenamientos en solitario. Al final en un triatlón de larga distancia la bici la tienes que hacer completamente solo y, por tanto, también es un factor mental entrenable. Además, cuando vamos en grupo la mayoría de veces vamos al ritmo de otros, es decir, con un ritmo diferente del que nos tocaría si individualizáramos el entrenamiento”.

Otro factor que deberíamos tener en cuenta pero no estancarnos es el principio de variedad en el entrenamiento. Nuestra protagonista nos comenta al respecto, “aunque estemos inscritos en una prueba de larga distancia donde el circuito de ciclismo sea muy llano y rápido, se deben combinar los entrenamientos y pedalear con desnivel. Al revés pasaría igual, si hacemos por ejemplo el Challenge de Madrid que tiene mucho desnivel está claro que en los entrenamientos habrán muchos metros a superar pero tampoco podemos olvidar los entrenamientos a ritmos rápidos y estables. Se trata de variar los entrenamientos y no hacer siempre lo mismo”.

Siguiendo la misma línea pero en relación al entrenamiento con potenciómetro Dolça nos comenta que, “es muy importante no ir todo el entrenamiento o todas las sesiones con un rango de vatios igual. Se deben meter series y cambios de ritmo dentro de los entrenamientos. Pueden haber intervalos que serán mas largos y donde no aumentemos mucho los vatios y también otros más cortos donde aumentemos la potencia. Esto nos permitirá que el cuerpo no se acostumbre a trabajar siempre con los mismos vatios. Poco a poco iremos mejorando la potencia de nuestras piernas”. Como siempre decimos, el cuerpo necesita de variedad de esfuerzos y actividades para adaptarse y mejorar.

Por último, Dolça considera fundamental el entrenamiento de la fuerza mediante ejercicios funcionales y con autocargas, concretamente dice que, “el entrenamiento funcional de fuerza en el gimnasio nos permitirá mejor nuestra potencia y esto repercute positivamente también cuando vamos en bici. Y no olvidéis el trabajo muscular del core, no solo en ciclismo, sino en todos los deportes, se trata de una musculatura implicada en casi todos los movimientos y es importantísimo su trabajo en el gimnasio”.