Empieza la temporada de triatlón y en este punto de la temporada, donde buscamos un óptimo estado de forma, algunos tendréis dudas con el peso. Desde Alimmenta, te ayudamos a conseguir la composición corporal que deseas… en 7 claves.

¿Bajar de peso o, más bien, porcentaje de grasa para llegar mejor a la carrera? La respuesta no es simple. Es cierto que algunos deportistas se sienten más ágiles y finos pero hay que vigilar con esa perdida que no nos de sensación de debilidad. Haz caso a tu cuerpo, a tus sensaciones.

Primero márcate un objetivo realista, ya que si necesitas perder más de 2-3 quilos estamos hablando de otro proceso y metodología. Como ya estás compitiendo no debes hacer ninguna barbaridad. Lo ideal sería que te pusieras en manos de un profesional, pero hay algunos consejos que puedo proporcionarte:

1. No te saltes comidas. Recuerda que debes realizar 5 comidas diarias, con unos horarios estables y escogiendo alimentos saludables.

2. ¿Sólo 5 comidas? Los días que entrenas debes añadir el recuperador después del entreno y si el entreno es largo (más de 90 minutos) debes ingerir algún tentempié o suplemento durante el ejercicio. Aunque quieras perder peso debes rendir al máximo en tu entreno.

3. No tengas miedo a los hidratos de carbono y no se te ocurra eliminarlos. Lo que sí puedes hacer es jugar con ellos. Centra su consumo cerca de los entrenos (en las comidas de antes y después) reduciendo su consumo (no eliminando) en las comidas más alejadas del ejercicio.

4. No olvides la proteína en la comida y la cena como mínimo. La puedes consumir a base de pescado, legumbres, carne, huevos o lácteos desnatados.

5. Consume una buena cantidad de frutas y verduras y potencia los productos integrales. Aunque los 2 días antes de la competición deberás reducir estos alimentos para disminuir la ingesta de fibra y así evitar sorpresas digestivas en la competición.

6. Modera la cantidad de grasa de la dieta, sobre todo la grasa saturada de los embutidos, carnes procesadas y rojas. Consume grasas de origen vegetal como la del aceite de oliva frutos secos, aguacate,… aunque igualmente con moderación.

7. Es conveniente que evites la bollería y dulces en general ya que van a enriquecer en calorías vacías nuestra dieta.

Si al realizar estos cambios aparece ansiedad, cansancio, bajada del rendimiento, peor recuperación después de los entrenamientos o hambre a deshora, es posible que estés siendo demasiado restrictivo o no estés cumpliendo con todas las pautas.

Analiza de nuevo tu dieta y si no te has dejado nada incrementa las cantidades poco a poco, empezando por los hidratos en las horas cercanas al entreno. Sigue potenciando los alimentos de origen vegetal como frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos,… las carnes y pescado más magros y los lácteos desnatados y sigue evitando los alimentos superfluos.

Con estos consejos espero que consigas llegar a tus objetivos y consigas una gran temporada llena de éxitos. Recuerda que el entreno se hace tanto en la calle como en la mesa.

Laia Gómez – Alimmenta