Gonzalo Marchena, director de triatletasenred.com, comparte esta reflexión en tono sarcástico sin dejar de lado la realidad que nos acompaña a muchos de nosotros en esta droga que llamamos deporte.
¿Te acuerdas que hubo un momento en tu vida en que las “series” eran simplemente aquellos audiovisuales en forma de capítulos televisivos, y un “puerto” poco más que el lugar donde atracan los barcos? En esa misma época la T1 o la T2 eran códigos más propios de un aeropuerto internacional ¿verdad?
Ahora estos conceptos tienen en tu mente una asociación diferente, sin duda, estas enganchado al triatlón, eres uno más de estos legionarios del deporte de las transiciones y hace ya tiempo que no concibes un fin de semana sin tu bici o la natación. Las vacaciones se programan en función de tu competición estrella de la temporada.
Has dejado algunos buenos amigos en el camino y ni si quiera tienes una excusa real para darles. Simplemente tienes entreno y no puedes ceder esa tarde – noche que seguramente merece. Aún así, después de clavarte tantos kms y series en el entreno , simple y llanamente te olvidas de ello. No sabes cómo, ni porqué, pero sacrificaste tu vida social.
Tus amigos ahora calzan calas y tienen gomas en las zapas en lugar de cordones. Te ayudan a abrocharte el neopreno antes de un entreno a mar abierto o una competi. Hablas de volumen, de carga, de frecuencia…conceptos que hace un tiempo no estaban en tu diccionario y ahora son parte de ti. Eres super “follower” de los Eneko Llanos, Raña, Saleta, o triatletasenred (…como no!) En Facebook la mayoría de perfiles de tus tantos amigos presentan sus mejores fotos acoplados o entrando en la meta de la última competición. La mayoría de interacciones que recibes son para comentar la foto subida de tu último gadget o de ese entreno que publicas bajo el título de “tirada suave” siguiendo los canónes del tripostureo, tan criticado como real. No faltas en ningun grupo virtual que tenga el TRI como reclamo…y te gusta!
¿Ir al cine? ¿cómo?…. Si no sabes que dan en televisión porque no la ves más allá del telediario de turno, que intuyes mientras desayunas tus cereales a la par que preparas tu bolsa de entreno y sincronizas el entreno en tu pulsómetro “tope de gama”. Eso si eres chica, si eres un tío…solo desayunas.
Que no te falte en la despensa el isotónico, las barritas o los geles… alimentos que tu abuela tiraría de una tacada a la basura a cambio de un buen cocido. Esa abuela que ya te ha repetido en diversas ocasiones …
– Niño que te estás quedando en los huesos, ¿estás enfermo?
Y es que ahora ya no entrenas para adelgazar, sino que adelgazas para correr. Controlas las cargas de Carbohidratos, conoces cómo realizar tu ingesta y qué cantidades necesitas. No tienes tan claro el dónde ni el cuándo porque va a depender del momento que tengas libre entre trabajo y entreno. Si eres de los que doblan entrenos, el caos se multiplica….
Si eres madre/padre de familia, tienes un plus de valor de proporciones paralelas a la de tu mala conciencia. Te apoyan, te entienden (o no), pero aún así sabes que estás en deuda, una deuda que esperas devolver algún día. Pero hoy no, “que tengo tirada larga” … Aplazas el pago en tiempo y dedicación y agradeces infinitamente su paciencia de entreno en entreno de dorsal en dorsal, siempre intentando en que esa tensa cuerda no se desgarre, aunque sabes que alguna fibra ya cayó en el camino.
Totalmente identificado…además lo he leído desayunando antes de una tirada suave
un saludo a todos los enganchados al Tri
No te digo de donde he sacado tiempo para leer este articulo XD. Grandisima y acertada reflexion! Saludos
En fin, estáis enfermos, sacrificar vuestros hijos por sufrir encima la bici o nadar un rato. Os acordaréis cuando ya sean mayores y no os hagan ni puto caso del tiempo que os habéis perdido y que ya nunca volverá. El triatlon estará siempre ahí, ciertas etapas de la vida no.
Gracias Jesus, saludos de vuelta!
Hola Julio,
De hecho así reza el titular del artículo : Crónica de una adicción.
Por tanto no hay nada que objetar a tu comentario en cuanto a su contendio. Respetable 100%
Tal vez las formas, despectivas, y la facilidad para juzgar las opciones personales y familiraes de otros que utilizas es lo que te deja retratado y hace que pierdas credibilidad.
Sin más….
Jugar a ser deportista de élite cuando no lo eres tiene su precio. De eso viven por ejemplo franquicias como Ironman, proporcionar competiciones de nivel profesional, a deportistas amateurs en su mayoría veteranos. Pero bueno es lo mismo que publicar tu vida deportiva día a día en Facebook, obviamente los pros no lo necesitan, ya les publican en las webs tri-oficiales. Todo es respetable, pero como dice el artículo, lo importante es reconocerlo. Es un poco montarte tu mundo de que eres pro…pero sin serlo. Un saludo