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La forma, el tamaño o el color de la lente son características en las que debemos fijarnos para encontrar nuestras gafas de natación perfectas.

Hoy le hemos preguntado a uno de los embajadores de ZONE3, Roger Manya, quien ha cerrado una espectacular temporada consiguiendo ser tercero de España de Larga Distancia, sobre qué tenemos que tener en cuenta a la hora de elegir unas buenas gafas para nadar, y estos son los consejos que nos ha dado.

Las primeras gafas que compra un deportista que se inicia, suele ser por error, en tiendas no especializadas, con la consiguiente decepción al tirarse a la piscina, porque no ajustan bien, entra agua, son demasiado oscuras o no tienen ángulo de visión…

A pesar de ser un elemento fundamental de nuestra mochila de entrenamiento, algunas personas no dedican el tiempo necesario para comparar la gran variedad de tipos de gafas que ofrece el mercado. Se deben considerar aspectos como la forma de las gafas, el tamaño, el color de la lente, el material de construcción y, por supuesto, el precio.

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Por lo tanto, la primera recomendación es probarnos varios modelos y marcas de gafas antes de comprarlas, igual que si estuvieras comprando un pantalón o unos zapatos.

Antes de evaluar cada uno de estos aspectos, es necesario pensar en su funcionalidad, es decir, el tipo de gafas que usemos dependerá de la actividad que vamos a desarrollar en el agua y de nuestros objetivos, por lo que deberemos elegir unas gafas determinadas si practicamos natación en el mar o en la piscina, teniendo en cuenta en el caso de las piscinas si son cubiertas o al aire libre.

La forma y el tamaño

Es fundamental que se ajuste a la forma de nuestra cara y para comprobarlo, podemos hacer la prueba de la succión. Esta consiste en que la superficie que tiene contacto con la piel se adhiera unos segundos al contorno de los ojos, sin la sujeción de las gomas, si esto ocurre, serán las adecuadas para ti.

Color de la lente

Dependiendo de la cantidad de iluminación donde vayas a usar las gafas, deberás considerar unas cuya lente sea más clara o más oscura. El color de la lente puede variar con las modas, pero existen algunos colores recomendados para cada uso. Para una visión sin alteración del color y el contraste, lo ideal es un color neutro como el gris o transparente, mientras que las lentes de color verde o marrones están recomendadas para nadar al aire libre, ya que aumentan el contraste sin alterar apenas el color

Por otro lado, si nuestro lugar favorito para practicar la natación es al aire libre, es muy aconsejable que la lente posea protección contra la radiación ultravioleta y así evitar posibles lesiones oculares. También sería interesante que fueran polarizadas, esto es un tipo de filtro que bloquea la luz que viene en una determinada dirección.

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