Esta vez tenemos la suerte de contar con la triatleta de ZONE3 Helene Alberdi para aconsejarnos y mejorar la natación en aguas abiertas.

Helene Alberdi es una triatleta de presente y, sobre todo, de futuro a la vista de la progresión y buenos resultados que acumula esta misma temporada, entre los que destacan la victoria en el Getariako IV Triatloia, el segundo puesto en el Half Triatlón Pamplona-Iruña, el bronce logrado en el Campeonato de España de Triatlón de Media Distancia celebrado en Guadalajara, y el segundo puesto en el Zarauzko Triatloia y el Half Triatlón de Vitoria-Gasteiz. Excelentes resultados de la triatleta vasca, que buscará seguir cosechando éxitos lo que resta de temporada.

Como ella misma nos contaba, “cuando una persona no lleva mucho tiempo en un deporte, como es mi caso, no es difícil ir mejorando ampliamente. Veremos si durante los próximos años puedo mantener esta progresión o tocaré techo con estos resultados”. En Triatletas En Red no tenemos ninguna duda que lo mejor está por llegar, mientras tanto disfrutaremos de estos consejos que seguro nos hacen mejorar la natación en mar abierto. ¡Gracias Helene!

1. Intenta ir acompañado y utiliza la boya de seguridad


“El primer consejo que os daría es que cuando nademos en el mar siempre vayamos acompañados. El mar no es nuestro medio natural y podemos tener sustos y vernos con dificultades simplemente por una pájara, picadura de medusa o un mal trago de agua. Por otro lado, muy importante la boya de seguridad, nos hará más visibles en el mar para los barcos y demás personas”.

2. La orientación como elemento clave en la natación en aguas abiertas


“Para nadar en aguas abiertas es muy importante la orientación, sobre todo en competición. Por eso antes de competir solemos revisar el recorrido. Aparte de las boyas, porque a veces éstas están muy lejos y no las vemos, hay que coger ciertas referencias como un edificio o algo característico, cosas que en definitiva nos ayuden a orientarnos y el día de la prueba no nademos metros de más. Yo recomiendo, por otro lado, cada cuatro brazadas más o menos levantar la cabeza y mirar hacia delante, comprobando que vamos en la dirección correcta. Esto te da confianza, tranquilidad y ayuda a no perder metros”.

3. Controla las condiciones climáticas


“Debemos ser conscientes que el mar no es una piscina y, por tanto, no encontraremos condiciones perfectas. En el mar, las condiciones climatológicas son muy importantes, antes de una sesión de entrenamiento o competición yo aconsejo revisar en internet el oleaje, las corrientes o el tiempo que se espera. En el País Vasco, por ejemplo, suele ocurrir que sobre las 19:00 o las 20:00 de la tarde aunque aparentemente el mar esté en calma, entra una galerna y te puedes ver con problemas y sustos importantes”.

4. Vigila las rozaduras pueden provocar heridas molestas


“Para la gente que está empezando este consejo les puede ir bien, tanto si nadamos con neopreno o sin él, fundamental aplicarnos algún tipo de crema lubricante o vaselina en aquellas partes del cuerpo que se pueden ver más dañadas por el salitre como la zona del cuello y las axilas”.

5. Adapta la técnica a la natación en aguas abiertas


“Debemos ser conscientes que la natación en piscina y en el mar son totalmente diferentes. Por lo que no tiene sentido entrenar como un nadador para luego competir en aguas abiertas o en triatlones. En la piscina el nado es mucho más técnico, deslizamos más, y en el mar nos hace falta mucha más frecuencia y fuerza, son cosas que debemos tener en cuenta. Por otro lado, en el mar a parte de levantar la cabeza para orientarnos, considero fundamental la respiración bilateral. En mi caso, fui nadadora de piscina y mi técnica era completamente diferente, intentaba deslizar mucho y con pocas brazada. No obstante, cuando empecé a competir en triatlón noté que en la piscina nadaba bien, pero luego en el mar las cosas no salían igual. Me he dado cuenta que debemos hacer ciertos cambios. Por ejemplo, yo suelo utilizar una goma con la que atarme los pies, incluso podríamos hacer servir una cámara de bici, nos atamos los pies y conseguimos por un lado mejorar la frecuencia de brazos y, por otro, aumentar la fuerza. Son ejercicios que considero fundamentales”.