La prueba se disputaba en el Canal Olímpic de Castelldefels, consistía en un circuito de ida y vuelta que sumaba 1.500 metros y según se participaba en la modalidad de 3.000 o 1.500 metros eran dos vueltas o una.
El día soleado, pero con viento que se hizo notar cada vez más, conforme avanzaba la tarde, levantaba el agua en el Canal Olímpic, la temperatura de la misma oscilaba alrededor de los 18ºC.
Cada nadador salía con un minuto de diferencia versus su antecesor, de esta manera se podía nadar con más tranquilidad que en una competición normal. Las salidas fueron muy puntuales, cosa de agradecer, pues había 172 participantes inscritos.
El circuito estaba balizado por boyas, que estaban unidas entre sí por una cuerda debajo del agua y que gracias al sol, se podía seguir perfectamente, sin tener que levantar la cabeza para orientarse. Además había carteles indicando el paso por los 250, 500 y 750 metros, el cronometraje era con chip, mediante la aproximación del mismo a la pancarta de meta.
La nota curiosa, la protagonizó Alfredo, nadador de 75 años, que utiliza aletas, tubo y tabla que en la parte que está sumergida lleva brújula para poder orientar-se, realizo la prueba de 3.000 metros en 39’36”, quedando cuarto de la clasificación general, todo un ejemplo de superación.
En la prueba de 3.000 metros el primer clasificado de la general fue Jonathan Gómez García con 38’25” y la primera clasificada fue Anna Diago Miravet con 41’06”.
En la distancia de 1.500 metros el ganador fue David Sanfeliu Marcó con un tiempo de 21’38” y la ganadora en categoría femenina fue Carol Fernández con 22’35”, además de llegar en segunda posición en la clasificación general.