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Cuando un hijo llega a nuestras vidas, todo cambia y una de las cosas que se alteran por completo son los entrenamientos.

Eso de cuidarnos hasta el más mínimo detalle y respetar nuestro descanso y sesiones de natación, bici, carrera o gimnasio, pasan a un segundo, quinto o vigésimo plano. Ya no disponemos del mismo tiempo para nosotros y parece que cualquier rato libre se dirige al cuidado de la criatura.

Pero ni mucho menos, podemos dejar de entrenar, porque ello afectaría negativamente a nuestra salud física y mental y a la larga también repercutiría en el correcto cuidado de nuestro hijo. Por eso mismo os voy a dar 10 consejos para entrenar con hijos que pongas en práctica y ojala te sean de ayuda para no dejar de hacer nuestro deporte favorito, el triatlón:

Deja de perder tiempo en cosas intrascendentes:

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Evita consultar constantemente el Facebook o el Whatsapp, y opta por mirarlo a última hora del día cuando ya tengas todas las labores de casa, del trabajo y del entrenamiento resueltas, para ello quita las notificaciones que te llegan y así no estar continuamente pendiente del mismo. Si calcularas el tiempo semanal que pierdes en estas dos aplicaciones, te echarías las manos a la cabeza y podrías ver que con ese tiempo te daría de sobra para entrenar más de 10 horas semanales.

Realiza menos tiempo de entrenamiento pero con más intensidad:

No hace falta hacer grandes volúmenes para mejorar la resistencia, incluso para aquellos que preparan un IronMan. A veces es más interesante hacer cambios de ritmo y series controladas que abusar de las sobrevaloradas tiradas largas con las que perderás mucho tiempo y en demasiadas ocasiones te estancan y agotan. Hacer sesiones más cortas e intensas, apenas te roban tiempo, te elevan la carga de trabajo semanal y además implican tener que descansar más días, algo que te vendrá de perlas para emplear con tu familia haciendo sesiones regenerativas con ellos en plan de paseos ya sea andando o en bici.

Levántate un poco antes que tus hijos y trata de cumplir tu rutina de entrenamiento a primera hora del día:

Independientemente de que te cueste madrugar, quitarte de en medio una sesión de entrenamiento nada más despertarte, te predispone para afrontar el resto del día con más vitalidad y energía, y en caso de que tuvieras que doblar entrenamiento, te será más fácil conseguirlo.

Haz el gimnasio en casa y trata de que tus hijos puedan estar contigo:

Con un kit sencillo de esterilla, banco y mancuernas podrás ejecutar todos los ejercicios de gimnasio que quieras para seguir estando fuerte. Aunque te parezca que no tienes tiempo, no debes descuidar esta parcela del entrenamiento tan importante, y con tan solo 30-40 minutos, una o dos veces a la semana te será suficiente para obtener mejoras sin agobiarte. Si lo haces en casa y no dependes de ir gimnasio, podrás estar con tus hijos mientras te ejercitas, algo que ellos agradecerán.

Apúntate para entrenar algún día de manera dirigida:

Optar por una escuela grupal para corredores y triatletas, del estilo a la que yo dirijo en distintas ciudades de España (www.intelligentinterval.es), hará que tengas que respetar un horario, buscando que sea acorde a tus intereses y en el que sepas la hora exacta de comienzo y finalización de los entrenamientos, ayudándote a organizar mejor la semana.

Da más prioridad a la carrera que a otras disciplinas para así perder menos tiempo:

Correr es la disciplina del triatlón en la que menos tiempo tienes que invertir de cara a mejorar tu condición física. Habrás comprobado que salir a correr media hora de manera intensa, puedes hacerlo en cualquier momento del día y te puede dejar con la sensación de haber entrenado mucho más que haber salido 2 horas en bici, así que intenta de centrarte más en la carrera en esas épocas en las que más apurado estés con tu familia.

Intenta aprovechar cualquier momento del día para entrenar sin que te des cuenta:

Vete andando rápido a todos los sitios que puedas, intenta subir las escaleras de casa, del trabajo o del centro comercial, evita coger ascensores, vete a buscar a tu hijo al cole en bici, haz los recados sin coger el coche, aprovecha los momentos en el parque con tu hijo para correr detrás de él haciendo esprines, o inclusive para hacer algún ejercicio de fuerza tipo dominadas, fondos, sentadillas o multisaltos.

Olvídate de plantearte muchos objetivos y limita las carreras:

Ya no puedes estar compitiendo todos los fines de semana y tienes que ser más selectivo en la elección de las pruebas a las que quieres ir. Mi consejo es que como máximo te programes lo siguiente: en verano 1-2 triatlones, en otoño 1-2 marchas cicloturistas, en invierno 1-2 carreras y en primavera 1-2 duatlones.

Busca el apoyo y la complicidad con tu pareja:

A veces solo pensamos en buscar tiempo para nuestros entrenamientos y nos olvidamos que tu pareja también debería de tener su espacio personal para hacer deporte u otros hobbys con los que le disfrute y desconecte de los hijos. Apoyarla en lo que le gusta, hará que ella también te apoye en tu hobby de hacer triatlón.

No te agobies con no poder entrenar determinados días:

De sobra sabemos el bajón moral que se experimenta al no poder cumplir determinadas sesiones que teníamos pensado hacer, pero ten en cuenta que es mucho peor la “comedura de tarro” que sufres pensando en que vas a perder la forma conseguida que lo que realmente supone en si saltarte uno o varios días de entrenamiento, así que, no te agobies por ello, y piensa que hacer algún descanso extra apenas te afectará, y en ocasiones te vendrá hasta bien para así ir asimilando mejor los entrenamientos de días anteriores.

Para terminar, piensa que ante todo somos padres y aunque ahora no puedas estar en tu máximo esplendor triatletico, ya habrá tiempo cuando tus hijos vayan creciendo y las cosas se vayan asentando. Afortunadamente practicas un deporte en el que apenas se pierden cualidades con la edad, sobre todo para la larga distancia. Y ten siempre muy en cuenta que ver crecer a tus hijos, con sus ratos buenos y menos buenos, pasa más rápido de los que te piensas y cuando te quieres dar cuenta ya no hay marcha atrás, así que organízate de la mejor manera posible para disfrutar de tu hobby y que no afecte en tu familia.

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