El alemán se consolida en la élite tras finalizar tercero en la clasificación general de las T100 World Triathlon Tour y se ¡sorprende a si mismo!
La segunda posición en la carrera y el podio de Rico Bogen en la clasificación general fue uno de los grandes ítems de la Gran Final de Las T100 World Triathlon Tour que coronó al ganador parcial y global que todo el mundo esperaba. Un resultado con el que el teutón ha desmontado uno de los grandes mitos que se asociaban a él, roto una de las barreras más importantes en su carrera y reafirmado inesperadamente a si mismo.
“QUERÍA DEMOSTRAR A LOS DEMÁS QUE PODÍA CON EL CALOR”
Un Bogen carburando en un enclave extremadamente caluroso y húmedo como Dubái no entraba en las quinielas de nadie, acusado de fallar siempre en esas condiciones. Algo que su actuación desmintió y demostró el trabajo detrás de esa posición. Un hecho del que el alemán saca pecho ante los que le cuestionaron «Mucha gente decía que no podía soportar el calor y eso me desafió y pensé, ¿cómo puedo soportarlo? Entrené mucho y el equipo que me rodeaba lo resolvió y ahora puedo decir, sí, puedo hacerlo, también puedo soportar el calor. Estoy muy orgulloso y ahora puede luchar tanto en el frío como en el calor».
UN TOP3 INESPERADO: “ES UNA LOCURA“
«El objetivo principal era permanecer en el TOP10, pensé que el octavo estaría bien y ahora estoy tercero. Es una locura» es la gran confesión de Bogen, que ni en sus mejores sueños, ni con ese salto de calidad esperaba acabar tan arriba en todos los sentidos y con ello sumar su primer gran logro en la élite tras conquistar el Campeonato Mundial de Ironman 70.3 de 2023. Adiós a su condición de ‘one hit wonder’.
LA IMPORTANCIA DEL EQUIPO EN EL TRIATLÓN PRO
Rendimiento del que apunta a su equipo como responsable. Un punto en el que ha querido incidir dentro del nuevo paradigma del triatlón. «Creo que el triatlón es un deporte complejo, por lo que no puedes hacerlo solo y necesitas un equipo para hacer las cosas bien». Algo que va tanto en lo deportivo, como respecto a factores externos como la presión mediática. «El año pasado, después de ciertos resultados, los medios de comunicación se me echaron encima y fue genial para hacer las cosas bien tener un equipo».
