En un escenario de devoluciones, quejas, incertidumbre los triatletas han dado una respuesta a muchas de las dudas que se planteaban respecto a la política de inscripciones.
Menos de un minuto ha durado la reserva de plazas a la edición 2021 del triatlón de larga distancia más popular en el mundo, el Challege Roth y en el que se dan cita anualmente unos 6000 triatletas llegados de todo el mundo.
Obviamente esta edición contaba con menos dorsales en tanto que muchos de los inscritos de 2020 traspasaron su plaza a 2021 pero mediante esta acción hemos podido comprobar dos cosas:
- Challenge Roth despierta pasiones y es por algo que los deportistas de larga distancia consideran que hay que hacer al menos una vez.
- La idea de “quedarse sin plaza” sigue siendo un gancho y un atractivo para los deportistas que, aún viendo la situación actual, seguimos apostando por inscribirnos a largo plazo asumiendo los riesgos que conlleva y que estamos experimentado en estos momentos.
Sin duda el ejemplo de Roth sirve para la reflexión colectiva y podemos debatir sobre si somos consecuentes con las quejas y reclamaciones sobre las políticas de inscripciones y/o cancelaciones de las que muchos han puesto en tela de juicio.
Veremos si sucede lo mismo en otros eventos de sold out rápido o bien este caso Roth es atípico por la realidad del propio evento.
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