El canadiense repasa sus errores en el IRONMAN de Canadá, confiesa sus posibilidades en Kona y revela cuán importante es la generación de Blummenfelt para que él siga en activo.
El pasado fin de semana Lionel Sanders pasó a la historia como el último ganador masculino de IRONMAN Canadá en el mítico circuito de Penticton, una sede que ya no regresará y cede paso a Ottawa. Triunfo con luces y sombras antes de Kona.
LOS NÚMEROS DE “LOCOS” Y “PASADÍSIMOS” SOBRE LA BICI: “FUE DEMASIADO PARA MI”
“Durante las primeras tres horas y media mantuve poco menos de 330 vatios” próximos a los 340w que promedió en el IRONMAN 70.3 de Mont-Tremblant cuando firmó su mejor ficha de siempre sobre la bicicleta (en 90K, no 180K). Algo que como reconoce tuvo una contrapartida “fue mucha potencia, más de la que yo estaba preparado y exploté a falta de 45 minutos“. Entonces, su registros decrecieron drásticamente hasta los 250w.
LA NUTRICIÓN EN CARRERA, SU TALÓN DE AQUILES
Un exceso que no solo tuvo sus consecuencias sobre la bici, sino también en su nutrición y en la carrera a pie. De hecho, para la octava milla ya tenía el estómago cerrado, para la duodécima ya había tenido que pasar por el WC portable y para la decimocuarta sus vómitos eran una realidad. Sanders no conseguía absorber nada “solo consumí 70g/h” y cree que es clave reducir los carbohidratos. Con ese panorama sobrevivir y concluir se convirtió en primordial, lo consiguió con tremendo éxito a un 3’43” de ritmo.
A pesar del mal trago, Sanders extrae conclusiones positivas: “significa que todavía tenemos áreas para mejorar y trabajar e idear un método para que logre absorber toda la nutrición“.
“NO TENGAS MIEDO AL ENTRENAMIENTO DURO, TEN MIEDO A NO RECUPERARTE”
Después de la sufrida victoria por lo físico en casa, Sanders suma tres triunfos y un podio en este 2024. Este último a apenas dos meses del Mundial IRONMAN de Kona. Una carga de competiciones que considera adecuada para lograr su mejor rendimiento en la Gran Isla. “Estoy absolutamente seguro de que esto tendrá un efecto positivo en mi rendimiento en Kona“.
Su filosofía la tiene clara: “si te recuperas adecuadamente y escuchas a tu cuerpo no tengas miedo al entrenamiento duro, ten miedo a no recuperarte“.
En ese aspecto, el ganador en Penticton cree que está avanzando “en la dirección correcta“ a pesar de los problemas de sobreesfuerzo y nutrición vividos en Canadá. Además, ve asombroso el reto de dar con la tecla acertada pues en el mundo del entrenamiento es un universo “dinámico” en el que “lo que funcionó en 2017 para mí, no necesariamente funcionará ahora” y le divierte “mantenerse en el juego“.
“NO HAY MANERA DE COMPETIR CONTRA ALGUIEN DISPUESTO A DESAFIAR SUS LÍMITES, SI TÚ NO LO HACES”
El ejemplo de esfuerzo y entrega de Kristian Blummenfelt (entre otros) tiene buena culpa de ese pensamiento de Sanders: “No hay manera de que puedas competir contra alguien como él que está dispuesto a llegar a los límites de la capacidad humana, si tú no haces lo mismo“. Condición extrema no exento de peligros controlados por Lionel “Debes tomar algunos riesgos y para mitigar el riesgo debes dormir y comer bien, así como escuchar a tu cuerpo“.
“PERDÍ EL TREN DEL MUNDIAL EN 2017 Y 2022”
Preparación específica con un único objetivo, Kona. Pero esta vez el canadiense verbaliza algo que puede que esté en el pensamiento de más de uno: vencer en la isla o hacerlo en Niza ya no está a su alcance, aparentemente. “¿Puedo ganar? Es muy posible que haya perdiera el tren en 2017. Tal vez esa fue mi mejor oportunidad y tal vez fallé“. No se queda ahí su cruda revelación, sino que considera que lo dejó escapar una segunda vez: “Mi segunda mejor oportunidad fue 2022 en St George y tal vez también lo perdí (el tren)“.
“La puerta está cerrada para mí, no hay problema, eso me quita que todavía puedo tener mi máximo potencial en esa carrera” es la madurada reflexión que el tiempo le regala a Sanders.
“QUIERO RESOLVER EL ROMPECABEZAS QUE ES EL MUNDIAL IRONMAN, NO (necesariamente) GANARLO”
Quizá haya perdido la oportunidad de ser campeón del mundo en pos de una generación que ya es el presente absoluto de la distancia y que le recuerdan al joven que un día fue “son como yo cuando comencé y son intrépidos, no creen que no escuchen, no les importa lo que hagan otras personas“.
Sin embargo, son esos mismos los que le hacen tener la motivación suficiente para continuar buscando sus límites “me inspiran a volver a mis raíces desde ese punto de vista y esforzarme a niveles increíbles y recuperarme y luego hacerlo en la carrera, así que estoy emocionado de hacerlo y de seguir trabajando para lograr lo que quiero”.
“No quiero conquistar la distancia IRONMAN y el mundial, sino resolver el rompecabezas de IRONMAN y aún no he estado ni cerca de resolverlo” es el deseo final de Sanders.